ACEPTACIÓN:
Ser
el padre de un niño con discapacidad no es muy diferente de ser el padre de un
niño “normal”, esa fue mi conclusión a los dos o tres meses de enterarme de que mi
hijo tenía AUTISMO. Durante esos dos largos y eternos dos tres meses de duelo reflexioné y me dije: MI HIJO NO HA
CAMBIADO y ya por fin podré ayudarlo. Lo primero que buscas es asesoramiento e
información y una asociación en la cual pueda recibir el tratamiento adecuado y
seguidamente después de empezar a
formarte de cómo llevar la estructuración adecuada y ayuda visual para tu hijo
empezar a trabajar conjuntamente con el .No podemos permitirnos como padres que
el duelo se alargue, ellos necesitan ayuda para conectar con el mundo. En mi
caso el periodo de adaptación fue bastante rápido hasta yo misma me sorprendí.
Me puse las pilas y nos pusimos conjuntamente y en paralelo también a trabajar
lo que veía que mi hijo le hacia falta ya que a nivel escolar no tenia el apoyo, encima en el colegio me decían “Usted no es ni el maestro ni el terapeuta de su
hijo”….claro que nó, pensaba, pero tendré
que suplir el trabajo que usted no esta haciendo. Esa dinámica de
trabajo como tuve que estar en el colegio ese hasta los 8 años aun a día de hoy
la sigo llevando pero muchísimo mas tranquilamente, puesto que mi hijo ya tiene
el apoyo que debiera haber tenido desde un principio por fin.
Todas las personas somos individuos diferentes en sexo, en
capacidades, en ritmos vitales y de aprendizaje. En gustos y aficiones, en
orígenes... ésta es la realidad diversa en la que vivimos y en la que viven y
vivirán nuestros hijos
Si somos capaces de ver esta diversidad en positivo,
afrontaremos más fácilmente las dificultades de encaje, que es normal que se
den y será una fuente de enriquecimiento para todos. Aprenderemos en el día a
día y nos formaremos para que nuestros hijos no se sientan frustrados.
Con mucho trabajo y dependiendo del niño pueden ir aminorando e incluso desapareciendo algunas cosas e ir a su vez en aumento la comunicación. Al igual que las personas sin discapacidad :NI TODOS SOMOS IGUALES , NI TODOS TENEMOS LOS MISMOS PATRONES DE CONDUCTA.
Con mucho trabajo y dependiendo del niño pueden ir aminorando e incluso desapareciendo algunas cosas e ir a su vez en aumento la comunicación. Al igual que las personas sin discapacidad :NI TODOS SOMOS IGUALES , NI TODOS TENEMOS LOS MISMOS PATRONES DE CONDUCTA.
Lo único que no podemos pretender como padres es
sumirnos en una depresión eterna en la cual estamos destrozando el futuro de
nuestro hijo. Un circulo vicioso que no nos lleva a ningún camino y encima cada
día perdemos un poquito mas de nuestro hijo. Cuando nacen tienes unas
expectativas para ellos que después se te vienen abajo pero durante ese tiempo
de duelo.
Si no
trabajamos conjuntamente para mejorar la autonomía de nuestros hijos su único
destino será una residencia y no serán felices por que no se les habrá dado la
oportunidad de avanzar porque hemos estado inmersos en nuestros problemas y no
hemos mirado realmente lo que ellos necesitaban. Todos necesitamos realizarnos
como personas.
Si no somos lo
suficientemente fuertes debemos de buscar ayuda pero no permitir NUNCA que
nuestros hijos no puedan avanzar porque se encuentran solos ,aislados y no solo
por ese diagnostico llamado ”AUTISMO”, sino porque no tiene el apoyo más
importante que un individuo pueda tener “LA FAMILIA”.